La cuenta regresiva terminó: el ingenio Plan de San Luis encenderá motores el 1 de diciembre con el inicio del corte, mientras que la molienda comenzará el día 5, confirmó Édgar Lárraga Ortega, consejero de la Asociación de Cañeros CNPR. Las fechas quedaron firmadas tras las últimas reuniones del Comité de Producción.
La meta no es menor: se estima una molienda de 1 millón 350 mil toneladas, una cifra que marcaría una “zafra normal” después de años golpeados por la sequía. El gremio mantiene la esperanza de que esta temporada permita recuperar ingresos y saldar deudas arrastradas por los productores.
Pero no todo es celebración. Lárraga Ortega lanzó una advertencia clave: el precio por tonelada podría caer hasta los 1,000–1,050 pesos, es decir, 300 pesos menos que años anteriores. Con un factor entre 7.7 y 8, la única defensa será la calidad. “Si entregamos caña deficiente, el precio puede bajar más”, alertó.
A nivel nacional, el panorama tampoco es sencillo. La producción podría superar los 5.5 millones de toneladas de azúcar, obligando a México a exportar alrededor del 18% al mercado internacional, además de las 188 mil toneladas ya comprometidas con Estados Unidos.
Un arranque prometedor… pero con retos que podrían definir el futuro económico de miles de familias cañeras.
