
En una sesión marcada por la polarización y el debate, el cabildo del municipio de Ciudad Fernández, decidió no aprobar un punto de acuerdo relacionado con la interrupción legal del embarazo. La propuesta, que buscaba alinear las políticas locales con los derechos reproductivos, no logró el consenso necesario para su aprobación.
El resultado final mostró una clara división dentro del pleno. Las regidoras Verónica González y Giselle Martínez votaron a favor del punto de acuerdo, defendiendo la importancia de garantizar derechos fundamentales para las mujeres y brindar certeza jurídica en materia de salud reproductiva. Por otro lado, la regidora Nanci Álvarez emitió un voto en contra, argumentando posturas conservadoras sobre el tema.
Sin embargo, lo que inclinó la balanza hacia el rechazo de la propuesta fueron las cinco abstenciones emitidas por el resto de los integrantes del cabildo. Esta decisión refleja una falta de posicionamiento claro por parte de la mayoría de los regidores, quienes optaron por no tomar una postura definida frente a un tema de alta sensibilidad social.
La sesión dejó en evidencia las tensiones y diferencias ideológicas que aún persisten en torno a la despenalización del aborto, incluso en espacios donde se requiere avanzar en la protección de los derechos humanos de las mujeres. Para las regidoras que apoyaron la medida, esta era una oportunidad para colocar al municipio a la vanguardia en materia de igualdad de género y derechos reproductivos.
Por su parte, colectivos feministas y defensores de los derechos humanos lamentaron el desenlace, señalando que la decisión podría perpetuar desigualdades y limitar el acceso de las mujeres a servicios seguros y legales en casos de embarazos no deseados o de alto riesgo.