
Pacientes del Hospital General de Rioverde han señalando la grave escasez de médicos en el área de urgencias, lo que ha dejado a pacientes y familiares en una situación de angustia. Según los testimonios, familias que acuden al nosocomio en busca de atención médica, se han encontrado con un sistema colapsado, donde no hay personal suficiente para atender emergencias.
Los afectados describen escenas de caos y frustración: pacientes esperando por horas sin recibir atención, mientras sus condiciones de salud empeoran, y familiares exigiendo respuestas ante la falta de liderazgo para gestionar esta problemática crítica. «No hay nadie que nos atienda ni quien nos diga qué hacer», declaró uno de los quejosos, evidenciando la desesperación y desamparo que viven quienes acuden al hospital en momentos críticos.
La principal preocupación radica en la ausencia de un protocolo efectivo de gestión para enfrentar esta crisis. Usuarios señalaron que, más allá de la falta de médicos, no existe una autoridad visible que coordine soluciones inmediatas o dé seguimiento a los casos urgentes.
El problema de la falta de personal médico en hospitales públicos no es un problema nuevo, pero en el caso de Rioverde, este déficit ha alcanzado niveles alarmantes, poniendo en riesgo la vida de pacientes que requieren atención inmediata. Las familias afectadas solicitan la intervención urgente de las autoridades estatales y federales para garantizar que el hospital cuente con el personal necesario y funcione de manera adecuada.